La cuota es un coeficiente económico que se dirige a establecer la participación en cargas y beneficios de la comunidad, actuando en posibles pagos o cobros comunes y en el recuento de votos o intereses.
La regla general es que la distribución de gastos se haga en proporción a la cuota de participación de cada propietario, sin embargo, pueden establecerse otros criterios que se contemplen en los estatutos de la comunidad o bien mediante acuerdo unánime de todos los propietarios, recogido debidamente en el acta de la junta. Muchas veces estas cuotas están mal calculadas y es necesario revisarlas y corregirlas.